Os voy a proponer una deliciosa receta de bizcocho de las que con más frecuencia hago últimamente en casa.
Rescatada de un estupendo libro de cocina y que después de darle vueltas y pillarle el punto os la plasmo en mi recetario. Esa es una de las finalidades de golpedepimienta, bueno, quizás la única, daros a conocer un montón de recetas y que, por supuesto, las podáis hacer en vuestra casa.
Un bizcocho con base de mantequilla, cobertura de albaricoque y un goloso glaseado de limón.
Y en estos momentos en los que pasamos más tiempo en casa del que nos gustaría, es posible que con un toque dulce nos vaya al menos un poquito mejor.
INGREDIENTES:
- 4 Huevos talla L.
- 170 gr. de Azúcar.
- 170 gr. de Harina para repostería (floja) y tamizada.
- 160 gr. de Mantequilla derretida.
- 100 gr. de Mermelada de albaricoque.
- 150 gr. de Azúcar glas.
- 2 Limones.
- Levadura química o de repostería.
- 1 Molde rectangular 30×11 cm.
- Papel de horno.
CÓMO ELABORAR UN DELICIOSO BIZCOCHO DE LIMÓN Y ALBARICOQUE.
Lo primero que haremos será pesar todos los ingredientes y así tenerlos listos para su uso. Precalentamos el horno a 180ºC.
Colocamos los huevos en un bol grande junto con la ralladura de los 2 limones y empezamos a batirlos con una varilla. Si tenemos una batidora planetaria, adelante y que trabaje ella por nosotros.
Sin parar de batir, añadimos el azúcar poco a poco. Tendremos que emulsionar bien la mezcla hasta que quede espesa y blanca.
Mezclamos la harina con una cucharadita de postre de levadura química (el equivalente a 1/2 sobre de la que solemos tener en casa del súper) y la vamos incorporando al preparado.
Por último, añadimos la mantequilla fundida y fría ( a temperatura ambiente para que no se vuelva a solidificar) y mezclamos todo perfectamente con la varilla sin dejar grumos.
Forramos el molde con papel de horno y vertemos en su interior toda la mezcla. Le damos unos golpecitos contra la encimera para que se asiente la mezcla y lo introducimos en el horno.
Unos 30 minutos a 180ºC.
Una manera sencilla de forrar el molde con el papel de horno es remojar unos segundos el papel en agua caliente. De esa manera lo ajustas perfectamente a las esquinas del molde.
Comprobamos que está cocido pinchando el interior con una aguja o puntilla fina y si esta sale seca, sacamos el bizcocho del horno. De no ser así, lo dejamos un par de minutos más.
¡Cuidado! No estés constantemente abriendo la puerta del horno mientras se está cociendo el bizcocho, porque si no se bajará.
Dejamos enfriar el bizcocho sin desmoldarlo sobre una rejilla. Con el horno todavía encendido preparamos la cobertura de albaricoque:
Para ello, solamente tenemos que calentar la mermelada en un cazo e ir removiéndola bien para que no se pegue. Podemos sustituirla por una de melocotón, naranja o la que más nos guste.
Desmoldamos el bizcocho con cuidado y lo cubrimos con la ayuda de un pincel con toda la cobertura de albaricoque y lo dejamos sobre la rejilla.
Preparamos el glaseado de limón:
Calentamos en un cazo el zumo de los 2 limones junto con el azúcar glas y sin dejar de remover con una varilla lo vamos espesando. Pintamos el bizcocho con el glaseado de forma generosa y metemos el bizcocho 1 minuto al horno caliente.
Puedes aprovechar el calor del horno para realizar otra elaboración, como un estupendo pan casero.
Lo sacamos y dejamos enfriar antes de comerlo.
Ya sólo queda servirlo y disfrutarlo con un buen vaso de leche, un café o solo, sin más.
¡QUE APROVECHE!