Hace ya muchos años que realicé un viaje a Estambul y me vino a la memoria el primer día que salimos a cenar y probamos su gastronomía típica. El resultado: pues incomible. Te sorprenderás pero esa era la realidad. No estábamos acostumbrados a esa explosión de especias y sabores tan diferentes y mezclados entre sí. Pero no nos rendimos y seguimos probando y descubriendo un poquito más de su gastronomía. El punto álgido fue la visita al bazar de las especias. Aquello ya fue el acabose…

Y dio la casualidad que recientemente cayó en mis manos un libro de cocina oriental, así que poco a poco y después de leer algunas recetas no hay nada mejor que probarlas y cocinarlas y de esta manera conocer los lugares que nos presenta, aunque sea gastronómicamente, que tampoco está nada mal.

Para empezar algo sencillo: una ensalada de  garbanzos con toques persas, como la sémola de trigo duro (lo que solemos conocer como cuscús).

¿Te animas a viajar conmigo a Oriente?

INGREDIENTES PARA 4 PERSONAS:

• 250 gr. de Garbanzos.
• 1 Puerro.
• 1 Cebolla.
• 2 Zanahorias.
• 125 gr. de Cuscús.
• 50 gr. de Tomate cherry seco.
• 80 gr. de Orejones de Albaricoque.
• 50 gr. de Melocotón seco.
• 2 Cebolletas frescas.
• Perejil fresco.
• Canela molida.
• 1 Limón.
• 1 Lima.
• 1 Naranja.
• Aceite de oliva, sal en escamas y pimienta.

CÓMO ELABORAR UNA EXÓTICA ENSALADA PERSA DE GARBANZOS.

Empezaremos por darle cocción a los garbanzos:

Acuérdate de ponerlos a remojo de víspera con un poco de bicarbonato y sal para que se ablanden bien. Mi consejo es que aproveches la ocasión para matar dos pájaros de un tiro y ya que vamos a cocer unos garbanzos no cuesta nada añadirle a la olla exprés 2 zanahorias, 1 puerro, 1 cebolla tostada en la sartén y 1 trozo de zancarrón de ternera y así tendremos una rica sopa para cenar otro día. Para mantener los garbanzos enteritos a mi me gusta meterlos en una malla de legumbres. Así que añadimos agua junto con todos estos ingredientes (sin sobrepasar los 3/4 de capacidad) en la olla exprés y los cocemos 18 minutos a partir de que suba la válvula. Una vez estén cocidos, sacamos la malla con los garbanzos y los dejamos en reposo a temperatura ambiente.

Rellenamos la olla con agua, le damos otros 20 minutos más y para mañana sopa. 

Para cocer el cuscús sigue las instrucciones del fabricante. Podrás encontrarlo fácilmente en infinidad de supermercados. Al igual que de tipos en función de su procedencia. Puede ser marroquí, palestino…de grano más o menos duro, integral etc.

Yo he utilizado el típico marroquí. La elaboración no puede ser más sencilla. Colocamos los granos de cuscús en un cazo y le añadimos un chorrito de aceite de oliva y la misma cantidad de agua hirviendo con sal (125 gr de cuscús – 125 gr. de agua)

Removemos bien con un tenedor para soltar los granos, tapamos y dejamos que repose 5 minutos. Pasado este tiempo soltamos de nuevo los granos y reservamos a temperatura ambiente.

Cortamos las cebolletas frescas, los orejones, los cherris y el melocotón en juliana. Muy fino todo y lo añadimos a un bol junto con los garbanzos y el cuscús.

Mezclamos bien y lo aliñamos con una vinagreta a base de:

• El zumo de la lima, el limón y la naranja.
• La ralladura de los tres.
• 2 Cucharadas de café de canela molida.
• Aceite de oliva, sal de escamas y pimienta.
• Un buen puñado de perejil recién picado.

Mezclamos todos los ingredientes para que se incorporen correctamente todos los sabores. Comprobamos que no le falte de nada (sal, pimienta, limón..). Cubrimos con papel film y dejamos que repose en el frigorífico.

Es conveniente sacarla una media hora antes a la mesa para que esté a temperatura ambiente. Siempre en función del tiempo, claro está.

Ya solo nos queda colocarla en una fuente bonita de ensaladas y servirla. 

Espero que os guste esta receta de garbanzos en ensalada con ese toque oriental. Quizás un punto más dulce de lo que estamos acostumbrados a comer por aquí. Eso sí los garbanzos castellanos. Del pueblo de mi madre (El Pedroso de la Armuña).

¡VAYA CONEXIÓN!… Ni Marco Polo.

¡BUEN PROVECHO!