Hoy vamos a ver que en poco tiempo se pueden hacer recetas estupendas. No es necesario pasarnos horas y horas en los fogones para elaborar un buen plato. A veces es suficiente con poner en un bol ingredientes que necesiten poca cocción, aderezarlos con unas gotitas de imaginación, un golpe de buen gusto, batir con energía y…¡ZAS! El resultado no puede ser menos que un fantástico salteado de espinacas como el que os propongo.
Ahora ya no hay excusa para salir el domingo a quemar los senderos con tu BTT, quedar con los amigos a tomar el Vermú o simplemente ir a dar patadas al balón con tus hijos. En poco menos de una hora tendrás la comida en la mesa.
¿No te lo crees?
Pues ve seleccionando el plan y ponte el delantal que vamos a darle R&R.
INGREDIENTES PARA 2 PERSONAS:
- 600 gr. de Espinacas frescas.
- 50 gr. de Bacon.
- 150 gr. de Setas.
- 1/2 Cebolleta fresca.
- 2 dientes de Ajo.
- 125 gr. de queso Mozzarella fresca.
- Aceite de oliva, sal y pimienta.
PARA LA SALSA BECHAMEL:
- 35 gr. de Mantequilla.
- 35 gr. de Harina.
- 1/2 litro de Leche.
- Nuez moscada.
CÓMO ELABORAR UN DELICIOSO SALTEADO DE ESPINACAS, SETAS Y BACON AL GRATÉN.
Como ya os he comentado al principio es una elaboración muy rápida de hacer.
Lo primero que haremos será preparar el salteado:
Cogemos una sartén o cazuela amplia y doramos el ajo picado con un buen chorrito de aceite. Justo cuando empiece a dorarse le añadimos la cebolleta cortada en brunoise. La dejamos cocinar a fuego suave para que no coja color y cuando esté blandita añadimos el bacon y las setas cortado todo en tiras. Salteamos todo a fuego fuerte y cuando empiecen a dorarse las setas, añadimos las hojas de las espinacas bien limpias.
No os asustéis al principio pensando en la «animalada» de espinacas que acabamos de echar a la cazuela…. en cuanto empiecen a cocinarse se quedarán en un suspiro.
Vamos rehogando las espinacas sin dejar de remover para que se vayan haciendo todas por igual. Será cuestión de unos 5 minutos el que las tengamos en su punto. Las ponemos a punto de sal y pimienta y las pasamos a una fuente bonita que podamos meter al horno.
Ahora vamos a preparar la bechamel:
Seguiremos la receta de las CROQUETAS DE JAMÓN IBÉRICO CON PAN JAPONÉS, que ya os presenté en el blog.
La única diferencia entre estas dos bechameles está en la elaboración de la roux. Mientras que en una masa de croquetas necesitamos que quede espesa, con cuerpo, para luego poder darle forma, en esta ocasión al ser para gratinar tiene que quedar más ligera. Si os dais cuenta le añadimos la mitad de harina y mantequilla por litro de leche.
Una vez que tenemos a punto la bechamel cubrimos con ella el salteado de espinacas. Le añadimos la mozzarella, cortada en gajos e introducimos la fuente al horno.
Si se nos ha quedado frío le damos unos minutos de calor a 180ºC hasta que alcance la temperatura idónea. Una vez lo tenemos suficientemente caliente, ponemos el gratinador del horno y dejamos que se vaya gratinando poco a poco. Sin quitarle el ojo de encima ya que enseguida pasa de gratinado a quemado y eso no nos interesa nada. Retiramos la fuente del horno, la colocamos en medio de la mesa y servimos.
Notarás que el queso Mozzarella entero le da un toque diferente al gratinado. Más carnoso quizás que con el queso rallado.
Ya veis lo rápido que hemos cocinado hoy, pero por ello no hemos dejado de elaborar un estupendo plato de verdura fresca.
¿A QUÉ ESPERAS?
Cada día me gustan más tus recetas
Así da gusto hacerlas. ¡Mil gracias!
Fáciles, rápidas y riquísimas. Para hacer a diario. Un acierto, Sergio
Ese era el propósito.
¡Gracias!